domingo, 30 de enero de 2011

Hola.

Ana: Hola, Ñuñaña. Estoy aquí para decirte que te odio por abandonarme una semana entera. Pero, en fin... las cosas son así. Y como no has venido a ser solidaria, no te voy a suplicar que te quedes. No te lo tomes como algo personal.
Lo peor esque seguro que ni ves esto antes de irte a la nieve. Y estoy hablando sola.
Susana no está, Susana se fue... T_T

Su: Hola, Añañaa! :D Sí, es cierto, no lo leí hasta ayer into the night y no me apetecía responderte... pero te quierooo! (8)
Pues eso, no fui solidaria porque tenia que hacerme mi supermaleta, eh. (Que conste)
Y respondiendo a tu pregunta (¿?): Sí, me lo he pasado muy bien en la nieve, he esquiado mucho y me he tirado por mi primera negra. Si es que soy una temeraria... u.u
A ver cuando te veo, que esta semana se me hizo extraña sin ti! igloveyou!
PD: Oye, esto de una conversación por blog es raro, pero moola.

martes, 25 de enero de 2011

Music

Hoy me he sentido inspirada, por el aire divino de enero o algo, y he ido a las antiguas carpetas de mi ordenador, aquellas que guardo en otro disco duro, en ese mundo lejano...
Me he encontrado con "Música", he picado y -obviamente- era la música que oía antes!
Y qué bien y qué rara me he sentido cuando la he vuelto a escuchar!
Es decir, me acabo de dar cuenta de que el pasado es bueno, porque si no hubiese escuchado esas canciones ahora no sería así...

Por esa razón estoy felizmente aquí escuchando mi música "antigua".
:3

sábado, 22 de enero de 2011

De colores.

Mi ventana da a la terraza de mi vecina.

Sale a tender por las mañanas. Lo hace despacio y con mucho cuidado, siempre llevando consigo una cesta de plástico verde. Me gusta mirar como lo hace los días soleados, porque todo lo que cuelga es de colores.

Toallas, mantas, sábanas, camisas, camisetas, chaquetas, pantalones, manteles. De colores.

Y el cielo es azul.

Qué poquito cuesta ser feliz sólo un momento.

viernes, 21 de enero de 2011

Felizmente aquí estoy, escribiendo la primera de muchas entradas, espero.
Este blog es, principalmente, para escribir esos pequeños placeres de la vida diaria que hay que saber reconocer y disfrutar.
Por eso mismo, felizmente, me sentaré a contar qué he visto; algo que seguro que a alguien hace feliz.